Elecciones

La Xunta no retrasará los comicios

Brote en A Mariña. Feijóo garantiza que las personas confinadas en la comarca lucense podrán votar, excepto los positivos. La izquierda lanza una ofensiva y pide suspender la cita electoral del próximo domingo

Testimonios en La Coruña sobre las expectativas de ir a votar el domingo, después de que se decretase el confinamiento en A Mariña por casos positivos de coronavirus.
Testimonios en La Coruña sobre las expectativas de ir a votar el domingo, después de que se decretase el confinamiento en A Mariña por casos positivos de coronavirus.Pepe FerrínLa Razón

Dos día después de decretarse el confinamiento de A Mariña lucense durante cinco días por un brote de coronavirus, fuentes de la Xunta de Galicia confirmaron ayer a LA RAZÓN que «por el momento» no se plantean posponer las elecciones. Aseguran que el brote está controlado y que no hay razones para volver a suspender unos comicios que ya fueron aplazados en el mes abril cuando el virus azotó con mayor virulencia a todo el territorio nacional.

La pandemia se ha colado en la recta final de la campaña gallega y los partidos de izquierda –que preferían que los comicios se celebraran después del verano– mostraron ayer sus dudas sobre la viabilidad de celebrar elecciones en la comarca de A Mariña, donde en estos momentos están confinadas unas 70.000 personas que pueden salir de sus domicilios pero no trasladarse a otras localidades que no sean los 14 concellos que conforman este área sanitaria.

Desde la oposición, el socialista Gonzalo Caballero pidió ayer «cautela» a Feijóo y que explique su plan porque no cree que se vayan a dar las condiciones para celebrar las elecciones de forma segura. En la misma línea, la candidata del BNG, Ana Pontón, insistió en que «no parece lógico que se pueda ir a unas elecciones» porque los vecinos «no tienen que escoger entre el derecho a la salud y el derecho democrático a votar». Por su parte, el candidato de Galicia en Común, Antón Gómez Reino, se mostró partidario de esperar a la decisión de la Junta Electoral Central, a la que su partido y Marea Galegista emitieron ayer una consulta.

Desde La Coruña, en una acto de precampaña, el presidente de la Xunta y candidato del PP a la reelección, Alberto Núñez Feijóo, defendió la celebración de las elecciones y aseguró que el número de nuevos contagios «está a la mitad que la media de España». En este sentido, recordó que en estos momento no hay ningún paciente en cuidados intensivos y que solo seis personas están hospitalizadas. «Hemos tenido un brote y lo estamos regulando y ordenando. Vamos a seguir trabajando con el mismo rigor que durante la pandemia. La situación es tranquila, pero tomaremos todas las medidas que sean necesarias, seremos implacables para preservar la salud de las personas», indicó el presidente de la Xunta, que pidió «responsabilidad y proporcionalidad» en un momento en el que Galicia «va a decidir su futuro para los próximos cuatro años». De hecho, Feijóo pidió «no politizar» el virus.

Respecto a la situación de las 70.000 personas que continúan confinadas, el presidente de la Xunta aseguró que se garantizará el derecho a voto de los confinados, a excepción de las personas que todavía sigan infectadas por el coronavirus. A día de hoy sería un centenar de personas que han dado positivo en la prueba PCR. El presidente de la Xunta señaló que en caso de prorrogarse ese confinamiento, el protocolo del Ministerio de Sanidad permite ejercer el derecho fundamental al sufragio para todas las personas salvo aquellas que continúen enfermas.

Dos millones de mascarillas

Las elecciones del próximo domingo se celebrarán bajo unas estrictas medidas de seguridad que fueron aprobadas la Resolución de 29 de mayo de 2020, de la Secretaría General Técnica de la de la Consellería de Presidencia, Administraciones Públicas y Justicia. Una de las primeras premisas para evitar contagios es, precisamente, intentar que no se produzcan aglomeraciones durante la jornada electoral. Así, se vigilará que se respete la distancia de seguridad entre personas, sobre todo, al comienzo y al final de la votación. Además, se recomienda que los electores lleven el voto ya preparado desde casa y se controlará en todo momento el número de votantes que hay en el interior del colegio electoral. Por otro lado, las personas mayores de 65 años tendrán prioridad para la entrada, así como las personas que presenten alguna discapacidad. En cuanto a la protección individual, los miembros de las mesas electorales dispondrán de cuatro mascarillas quirúrgicas cada uno, para renovarlas cada cuatro horas, así como pantalla facial. También se dotará de mascarillas quirúrgicas o higiénicas a todas las personas votantes en el momento de acceso al local electoral, que se deberán utilizar obligatoriamente. En este sentido, se contará con dos millones de mascarillas, aunque no se prevé el uso de todas ya que probablemente, el electorado acuda con ellas desde su casa.

Sin miedo a votar

LA RAZÓN recorre las calles de La Coruña para conocer si los gallegos temen o no acudir a las urnas el próximo domingo. En líneas generales, la pandemia no frenará la participación ya que los gallegos creen que los protocolos para salvaguardar la seguridad y la higiene de los centros de votación garantizan la seguridad. «Me da más miedo ir a la playa o a los bares que acudir a votar el próximo domingo», asegura Soledad Girón, de 59 años. Esta coruñesa de raíces andaluzas pasea por unas de las avenidas comerciales de la ciudad con su mascarilla y manteniendo la distancia de seguridad establecida. «Las medidas de protección decretadas por la Xunta son suficientes, solo es necesario que todos las cumplamos», dice. Como suele hacer en las citas electorales previas a la pandemia, acudirá a su centro electoral por la mañana para depositar un voto que ya tiene decidido.

Por la misma calle pasean Mariné Rubiales y Mariné Fernández, madre e hija, que miran escaparates. La madre, de 89 años, insiste en que «por supuesto» que irá a votar. Pese a ser grupo de riesgo y haber pasado los tres meses confinada en su casa, asegura que el domingo acudirá con «ilusión». Ya es una veterana y ha perdido la cuenta de las veces que ha acudido a las urnas desde que se instauró la Democracia. Explica que irá al colegio electoral y «si veo que hay mucha gente, volveré más tarde». A su lado, su hija, Mariné, de 60 años, subraya que «no tiene miedo porque en este momento creo estamos mucho más preparados y la gente está más protegida».

Son precisamente las posibles aglomeraciones que se producirán el próximo domingo en los centros de votación lo que preocupa a Patricia Casas, de 40 años. «Tengo miedo porque al final no deja de ser una aglomeración de gente. Igual que me da miedo ir a las terrazas y a algunos sitios también me dará miedo». Cerca de la zona Obelisco de A Coruña se encuentran tomando un café Álvaro y Jesús. Ambos tienen claro que el domingo irán a votar, pese al rebrote de A Mariña. «A votar no le tengo miedo» señala Jesús López, de 70 años. Ambos coinciden en subrayar que «lo más importante» es que el próximo Presidente de la Xunta tenga «solvencia» porque se «ha causado un grave trastorno a la economía y lo que nos vienes será muy difícil».

Javier y Pablo son estudiantes y los dos coinciden en subrayar que votarán con normalidad aunque entienden que las personas de riesgo puedan tener algo de miedo. «Es necesario votar porque se reestablecerá la normalidad que perdimos durante la pandemia», concluyen.