Japón extiende el estado de alarma a dos meses y medio de los Juegos Olímpicos

El país solo ha inmunizado a un 2,2% de su población, la tasa más baja entre las economías avanzadas

Jaime Santirso

08/05/2021
Actualizado a las 18:52h.

Japón ha prolongado el estado de emergencia cuando apenas faltan dos meses y medio para la celebración de los Juegos Olímpicos de Tokio. Así lo ha anunciado esta tarde en rueda de prensa el primer ministro nipón, Yoshihide Suga. Esta alerta, la tercera desde el comienzo de la pandemia , entró en vigor a finales de abril y debería haber concluido la semana que viene, pero se alargará hasta final de mes. A las cuatro prefecturas afectadas –Osaka, Hyogo, Kioto y la capital, Tokio– se añadirán Aichi y Fukuoka a partir del próximo miércoles.

Las exigencias gubernamentales, no obstante, suponen una ligera relajación con respecto a las vigentes. Aquellos locales comerciales obligados a echar el cierre podrán volver a abrir sus puertas hasta las ocho de la tarde . También la hostelería, aunque las bebidas alcohólicas seguirán prohibidas. Los eventos multitudinarios, por otro lado, podrán celebrarse de nuevo sin rebasar los 5.000 asistentes o la mitad del aforo.

En las últimas 24 horas, las nuevas transmisiones detectadas en las cuatro prefecturas se han mantenido por debajo del millar. El cómputo nacional se cifra en 4.380, lo que eleva el total hasta la fecha a 622.000 infectados y 10.566 víctimas mortales. «La cantidad de gente en Tokio y Osaka ha disminuido de manera drástica, lo que demuestra la efectividad de estas medidas a la hora de reducir el tránsito peatonal», ha detallado Suga durante su intervención. Pero, «de todos modos, el sistema sanitario está sometido a un gran estrés y nuevos casos continúan emergiendo ».

Nuevas mutaciones

La virulencia de la cuarta oleada de la pandemia en Japón está relacionada con la aparición de nuevas mutaciones como la británica –o N501Y–, así como la temida cepa que en la actualidad ha llevado India al colapso. «Variantes más contagiosas están sustituyendo a la original», ha afirmado hoy la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, durante una rueda de prensa. «Nuevos casos están emergiendo (...) y el movimiento de personas es un modo crucial de evitar que el virus se extienda fuera de control ». De acuerdo a un estudio realizado a finales de abril por el Ministerio de Sanidad, la secuencia genética de 15.000 pacientes refleja que al menos 9.000 responden a nuevas cepas del patógeno.

Las autoridades han asegurado en todo momento que el estado de alarma ni su extensión afectará a la Olimpiada, cuya inauguración está programada para el 23 de julio. Sin embargo, las restricciones harán «muy difícil» la inminente visita del presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach; según ha reconocido hoy la presidenta del equipo organizador, Seiko Hashimoto.

¿Juegos cancelados?

El COI ya ha dictaminado que un segundo aplazamiento no es una opción, por lo que de no poder celebrarse este verano como está previsto los Juegos quedarían cancelados. Los organizadores estudian desde finales de abril la posibilidad de renunciar a la asistencia de espectadores. Toshihiro Nikai, secretario general del partido de gobierno –el Partido Liberal Democrático– llegó incluso a apuntar que cancelarlos «sigue siendo una opción» . La mayoría de la población del país lo vería con buenos ojos: encuestas como la realizada por Kyodo News en enero reflejan que hasta un 80% de los japoneses se opondrían a los Juegos ante el contexto actual.

Tampoco ayuda la lentitud con la que las autoridades han iniciado la campaña de vacunación, la cual no comenzó hasta mediados de abril. A día de hoy, Japón tan solo ha inmunizado a un 2,2% de sus ciudadanos, la tasa más baja entre las economías avanzadas. Pese a haber importado grandes cantidades de vacunas, la mayoría de ellas continúan almacenadas, pendientes de inoculación en un programa ralentizado por la falta de efectivos y las trabas administrativas. Una encuentra reciente, también de Kyodo News, establecía que hasta un 60% de la población criticaba el desempeño del Gobierno.